Sapiosexualidad

La inteligencia, el primordial factor de la atracción

En el arte de la seducción existen muchos factores que determinan que alguien se entregue ante nuestros encantos y quede atrapada por un irresistible atractivo. O el caso contrario, seamos nosotros quienes no podemos evitar sentir atracción hacia otra persona. 

Durante mucho tiempo el principal de los elementos que más atrae a otra persona es la apariencia física. Suele suceder que a pesar de la buena presencia de alguien muchas veces buscamos más que solo una cara bonita o un buen cuerpo. Y claro, sentimos atracción por la otra persona debido a su belleza, pero ¿qué pasa cuando queremos conversar de un tema de nuestro interés,  cuando queremos tener una charla diferente o simplemente cuando disfrutamos de un tema nuevo, algo de lo que podemos aprender de alguien más? Acabará ese intento de seducción en un fracaso.

Evidentemente existen aquellos que quieren en un momento dado pasar un buen “rato” con alguien que les gusta físicamente y no les interesa mantener charla alguna o saber si existe algo en los conocimientos de la otra persona que puede atraerle aún más.

Con el paso del tiempo ha ido en aumento el número de solteros que buscan más que solo una buena apariencia, lo que más les atrae es una persona culta y con una conversación interesante. Buscan nuevos estímulos intelectuales, mentes que los hagan pensar, reflexionar y plantearse interrogantes.

Estas personas que buscan conversaciones que logren abrir su mente y encontrar una complicidad más allá de lo físico se denominan Sapiosexuales.

“Me parece extraordinariamente sexy el aroma de tu inteligencia”

Anónimo

¿Qué es una persona sapiosexual?

El significado de la palabra sapiosexual etimológicamente viene del latín “sapiens” que significa “sabio”. Por lo que podríamos definirlo como sentir atracción, excitación sexual o erótica por la sabiduría o inteligencia de otra persona.

Se es sapiosexual cuando la atracción y el deseo deriva de conversaciones, experiencias, estímulos e interacciones basadas en conocimientos y aspectos de índole intelectual que provocan una admiración.

Para la persona sapiosexual, la estimulación mental es infinitamente más excitante que la belleza física. El aspecto central del deseo se basa en la inteligencia de la otra persona, sin desmerecer otros componentes de la personalidad ni de la estética. Simplemente tiene como prioridad encontrar a alguien con mucho conocimiento y que sea digno de admiración, aunque éste no posea una buena apariencia física.

Muchos son los hombres y mujeres que con su inteligencia han logrado ser grandes seductores, a pesar de que en algunos casos el físico no les favorecía mucho.

Todos en algún momento de nuestra vida hemos visto o conocido a personas que sienten atracción hacia alguien más, cuya atracción va más allá de lo físico o de la belleza externa. Claros ejemplos son el niño que gusta de su maestra en el colegio, o la compañera que se siente atraída por su catedrático universitario, también el joven que anhela sexualmente a personas mayores. Todos estos logran identificarlos como alguien que los colma de conocimientos nuevos, alguien de quien podrían aprender muchas cosas y obtener nuevas experiencias.

La sapiosexualidad implica que se valore más lo interior que lo superficial. Sabiendo esto, un sapiosexual no sentirá nunca “amor a primera vista” ya que antes de sentir algún tipo de atracción o deseo hacía alguien más, primero debe conocer a esa persona lo suficiente para reconocer que le genera o le incita un interés intelectual.

“La atracción mental es mucho más fuerte que la física… De una mente no te libras ni cerrando los ojos”

Anónimo

Diferencias entre hombres y mujeres sapiosexuales:

En cuestión de géneros, muchos especialistas afirman que los pocos estudios que se han realizado sobre sapiosexualidad apuntan a que hay más mujeres sapiosexuales que hombres, esto se debe a que se considera al cerebro como el principal, más grande y más importante órgano sexual, y según los estudios el cerebro femenino necesita de otros estímulos adicionales a los que proporciona la vista para poder sentir atracción o deseo hacia un hombre.

Entre estos estímulos se encuentra la audición y en el estudio Some people are attracted sexually to intellingence: A psychometric evaluation of sapiosexuality” se concluyó que hay una relación entre el coeficiente intelectual y el atractivo sexual. Un hombre con CI más alto tendrá una mejor conversación, mejores temas para charlar y resultará más atractivo para las mujeres.

Por lo tanto, el cerebro femenino con una buena estimulación (intelectual) puede llegar a proporcionar magnos momentos de placer por encima de la estimulación de las zonas erógenas.

En este mismo estudio se afirma que la inteligencia es la segunda característica más valorada en una pareja, solo por detrás de “amable y comprensivo”.

Otros psicólogos indican que puede ser mayor el índice de mujeres sapiosexuales que de hombres porque tradicionalmente se ha asociado a la inteligencia con seguridad, experiencia, protección o estabilidad, lo que provocaría expectativas sexuales más altas.

Los hombres por lo general somos más visuales, pero esto no quiere decir que la sapiosexualidad sea exclusiva del género femenino y tampoco que las mujeres se fijan menos en el físico de los hombres.

¿Cómo saber si eres un sapiosexual?

Cuando una persona se autodenomina sapiosexual debe saber que está mostrando bases diferentes en atracción en comparación con los demás.

Eres el tipo de persona que busca un nivel de inteligencia y de conocimientos tan altos en alguien más y es tu principal componente de atracción. Buscas a quien admirar y te sentirás aún más atraído o deseoso por esa persona si también los que están cerca de ti lo valoran de forma positiva.

Existen algunas características o comportamientos que te pueden facilitar saber si eres un sapiosexual:

  • Te gusta debatir: disfrutas de conversaciones complejas, incluso puedes llegar a sentir excitación cuando compartes tus ideas o pensamientos y la otra persona hace lo mismo. Será mayor el placer cuando se trata de temas como política, ciencia, arte, cultura y en mi caso medicina.
  • Siempre buscas aprender: estás en constante búsqueda de conocimiento, nuevos retos intelectuales, quieres salir de la rutina, te gusta enseñar cosas nuevas a los demás.
  • Cuando conoces a alguien inteligente, más te atrae: eres curioso por naturaleza, por lo tanto, una persona misteriosa, complicada de entender o alguien de quien aprendes algo nuevo con solo una conversación te resultará más atractiva.
  • Admiras a las personas con buena oratoria: te encanta escuchar a personas hablar con palabras cultas o términos poco conocidos por la mayoría. Puedes llegar a sentir desprecio por las faltas ortográficas y/o una mala utilización del lenguaje.
  • Atracción sin priorizar en la apariencia: ves la atracción de una manera diferente a los demás. Prefieres a una persona inteligente y llena de conocimientos a un buen físico.

¿La sapiosexualidad puede conllevar algún peligro?

Existen ciertas circunstancias en las que sentir demasiada admiración hacía alguien más puede tener algunas desventajas, especialmente en personas inseguras o con baja autoestima ya que se pueden crear relaciones de dependencia por el poco valor que tienen de si mismos. Admiran con tanto ímpetu a quien consideran sabio porque sienten que ellos no lo son.

La baja autoestima y la dependencia creada hacia otra persona puede determinar la aparición de diferentes trastornos de depresión o ansiedad, trastornos de la personalidad, trastornos de la conducta alimentaria, adicciones o conductas suicidas.

Claramente se debe tener un equilibrio entre la admiración a otros y el respeto propio. Si se logra encontrar esa estabilidad se puede tener una vida buena sin crear relaciones de dependencia emocional y con una buena autoestima.

Todos debemos ser capaces de reconocer que la inteligencia consiste no solo en el conocimiento, si no también en la destreza de aplicar los conocimientos en la práctica.

Tener acceso a personas más inteligentes o con más conocimiento debería ser considerado algo bueno, no una amenaza. La envidia se puede interpretar como una declaración de inferioridad.

A mi parecer, todos en algún momento podríamos haber experimentado la sapiosexualidad, ya que cada vez hay más personas que no se sienten atraídos por lo físico, sino por el intelecto. Esto pudo haber pasado a cualquier edad de nuestra vida o quien sabe y pueda pasarnos. Lo que hay que tomar en cuenta es que no tenemos que sentirnos inferiores a los demás, tampoco crear una dependencia hacia esas personas.

Es probable que exista una mayor tendencia a la sapiosexualidad al terminar la adolescencia. Una conversación interesante te puede llenar de nuevas ideas, te puede brindar una nueva perspectiva de ver el mundo, puede generarte nuevos retos intelectuales.

La inteligencia, sin temor a equivocarme es un rasgo evolutivo de mucha relevancia y puede hacer que cualquier característica física o una personalidad alegre pase a segunda instancia a la hora de sentir atracción hacia otra persona.

La inteligencia siempre genera seducción, aunque no se definan como sapiosexuales. Suelen ser personas exigentes, con curiosidad, que buscan retos intelectuales y se aburren fácilmente.

“El amor es como una escala de gradación que empieza con la belleza del cuerpo, para después acercarse hacia las ideas y a la gente que muestra una inteligencia privilegiada”

Platón

Referencias bibliográficas

Gignac, G., Darbyshire, J. Y Ooi, M. (2018) Some people are attracted sexually to intelligence: A psychometric evaluation of sapiosexuality. Intelligence 66, 98-111

Miclutia, I. (2019). New challenges of sexuality of the 21st century. Acta Medica Marisiensis 65, 12-13

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